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Con todo el protagonismo para la climatología adversa, el Peugeot 207 Súper 2000 del único equipo andaluz en el Nacional de Rallyes fue magistralmente conducido hasta la meta del Rallye Cantabria Infinita, disputado este fin de semana. David Pérez y Alberto Chamorro alcanzaron el podium en su categoría.
“Ha sido el rallye más difícil y exigente que hemos corrido nunca”, con esas palabras se expresaban David Pérez y Alberto Chamorro a la llegada al Parque Cerrado de Santander en la tarde del pasado sábado, tras haber disputado la 32ª Edición del Rallye Cantabria Infinita tercera prueba del Campeonato de España. Tercero en su categoría (Súper 2000) y décimo absoluto de la Clasificación General es un bagaje extraordinario que el equipo andaluz se trae de tierra cántabras habiendo sacado muchas conclusiones de la conducción del vehículo en unas condicionesfrancamente delicadas. Pero hagamos la película de la competición.
Por diversas circunstancias, la prueba cántabra se disputaba este año en dos etapas. La Etapa del Viernes constaba de dos tramos de velocidad (en realidad uno mismo repetido dos veces pero con diferente longitud) que se disputarían entre las 6 y las 11 de la noche. La mañana se presentaba soleada pero los meteorólogos del lugar, que hay muchos, nos adelantaron que por la tarde llovería copiosamente. Así fue y el equipo GAV Sport regló el 207 para el líquido elemento; tras los días de test también bajo esas condiciones, David y Alberto se dispusieron a correr una de las etapas más complicadas de su vida deportiva. El primero de los dos tramos se celebró con luz diurna bajo un auténtico aguacero al que le acompañó la niebla y la noche en su segunda pasada, lo que dificultó aún más la conducción dejando algunos damnificados entre los participantes. A la conclusión de esta primera Etapa, David nos comentaba: ”Ha habido zonas del tramo en las que nos hemos tenido que parar literalmente pues no se veía nada por la niebla. Patina muchísimo y cometer un error en estos tramos se paga muy caro. A ver si mañana hay más suerte y mejora el tiempo”. Leer más.
Pero sus deseos se hicieron realidad a medias. La segunda etapa del Rallye Cantabria arrancaba a las 7 de la mañana desde Torrelavega bajo un auténtico diluvio y las previsiones en los tramos situados más al este de la Comunidad tampoco daban demasiados ánimos. De nuevo monta de neumáticos mixtos con rallas para expulsar el barro de los tramos en el 207 y seis tramos de velocidad por delante esperaban al equipo andaluz, que afrontaba esta etapa con muchas ganas de seguir aprendiendo en un terreno tan hostil, lleno de humedades y de cambios de asfalto y grip.
En esta ocasión el recorrido constaba de tres especiales a doble pasada. El fuerte aguacero del viernes se cambió por la lluvia intermitente de la mañana del sábado que volvió locos a más de uno con la elección de neumáticos y acabó con muchos vehículos marcados por sus excursiones a la naturaleza.
Tras la disputa de los tres primeros tramos, el 207 llegaba al Parque de Asistencia para realizar su último chequeo donde se mantiene la monta de neumáticos de cara a la última sección, que se presentaría muy dura como nos comentaba el propio David Pérez: “Con los tramos secándose y ahora con neumáticos de agua debemos tener cuidado de no degradarlos y de no pinchar”.
Con el coche cada vez más por la mano, el equipo andaluz fue mejorando los tiempos parciales de forma brillante y en ésta última Sección el feeling con el coche dio sus frutos entrando regularmente entre los diez primeros de la General, a pesar de lo que sufrió el equipo en el último tramo del día: “Al estar el 207 tarado muy blando para la lluvia y calzado con neumáticos de agua, los 20 kilómetros de último tramo completamente seco han sido un suplicio pues el coche balanceaba demasiado y no me daba confianza para atacar.”
En todos los casos, David y Alberto llegaban al Parque Cerrado de Santander a las 2 de la tarde del sábado completamente satisfechos, con muchas lecciones aprendidas y con una experiencia acumulada que le servirá para futuras competiciones. Encantado por su actuación en Santander, el piloto granadino realizaba un balance final: “Ojalá hubiera más rallyes de este tipo a lo largo del año. Correr en seco, con los neumáticos correctos y en tramos que agarren es lo que tenemos normalmente en Andalucía. El Campeonato de España es una escuela permanente y su nivel de exigencia te obliga a mejorar en cada prueba. Creo que alcanzar la meta en un rallye tan difícil como este y encima entrar entre los diez primeros de la General resulta todo un éxito para el Equipo”.
No se quedaba atrás en elogios el granadino hacia todos los miembros del Equipo: “hasta aquí no hemos llegado Alberto y yo solos. Ha sido una semana de duro trabajo desde el primer mecánico al ingeniero pasando por todas las personas que con sus indicaciones y su colaboración han hecho posible nuestro resultado. El trabajo en el coche de toda la gente de GAV Sport y la entrega y dedicación de todos sus miembros han contribuido al resultado”.
La alegría se extendía al propio Director Deportivo del equipo ya que sus consejos habían surtido efecto y ahí quedaba la clasificación: “Veníamos a Cantabria con el coche completamente nuevo de todo, motor, suspensiones, caja; nuestro objetivo principal era hacer kilómetros en circunstancias extremas como las que se han dado aquí de tramos que patinan, humedades, lluvia, etc. y creo que hemos cumplido con creces la meta que nos habíamos propuesto”, nos apuntaba Gabriel Villalobos antes de partir de vuelta para Málaga.
La próxima prueba del equipo será el Rallye Rías Bajas en Vigo el próximo sábado 29 de mayo.
