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Aunque era un secreto a voces, la Federación Andaluza emite un comunicado para oficializar la decisión que le fué otorgada a la escudería por la Real Federación Española oficialmente el pasado mes de Abril.
La edición 28º del Rallye de Andalucía, la correspondiente al presente 2010, volverá a ser gestionada por el organizador que revivió la prueba en el año 2004 y que organizó en soledad en las dos siguientes ediciones.
En el año 2007 y con la inspección realizada al rallye en formato regional, llega un acontecimiento que adelanta los deseos de Rall Racing en un año. Tras arrojar el guante la anterior Alcaldesa de Córdoba en la gala de campeones de la Faa de 2006, en la que demostró su deseo de que la prueba retornase al primer nivel y agradecer públicamente el trabajo del organizador en pos de ello, el presidente de la Real Federación Española agradeció el gesto y comunicó que apoyaría en todo lo posible su consecución "Ya que Córdoba y por extensión Andalucía deben estar en el nacional". Desde ese mismo momento, comienza un trabajo contrareloj ya que todo estaba dispuesto para la realización del rallye en próximas fechas y había que cambiar todo el formato ya que pasaba a ser directamente preinspección para el nacional. Libros de seguridad, rutometros, roadbooks, oficinas, recorridos, todo tenía que acojerse a la normativa y el rallye pasó del mes de abril a mes de noviembre, fecha inusual de la prueba cordobesa. El acuerdo llegado con la federación estatal, involucraba a la federación territorial en la orgánica de la prueba, haciendose cargo desde ese día y hasta la finalización de la edición de 2009, de la gestión económica y conjuntamente la deportiva junto a Rall Racing. Leer más.
Pero no todo fué un camino de rosas. Muchos desencuentros entre federación y escudería hacian peligrar la prueba ya que las decisiones que se tomaban no eran del gusto de muchos de los integrantes. Pero el rallye siguió su camino, a pesar de las deudas que producía.
2009 se preveía como el año de transición hasta que Rall Racing obtuviera de nuevo las riendas. Todo estaba a su favor y la Real Federación Española era consciente del potencial organizativo de Andalucía y ya en 2008, tras la prueba, Carlos Gracia se lo comunicaba al presidente de la escudería y le hacía llegar su visto bueno a la organización en solitario.
La 27 edición se emprende con una abultada deuda y el objetivo principal era el de reducir presupuesto y captar mayores ingresos. El primer se cumplió y el recorte efectuado tras consultar a diversos probeedores, sobrepasaba a la deuda. El Sierra parecía que respiraba.
Diversos desencuentros entre la cúpula federativa y escudería en los últimos días de la prueba y posteriores, daban al traste con un buen año de trabajo en sintonía entre organizadores. Esto proboca la dimisión del presidente de la escudería, Rafael López, por agotamiento en una lucha que parecía no acabar nunca. Manuel Muñoz coge el testigo que le deja su mentor y respaldado por el y el resto de componentes de su Junta Directiva, marcan unas bases de actuación para seguir adelante. El Sierra Morena tiene que volver a su escudería totalmente.
El respaldo a la decisión es total entre las instituciones cordobesas y el presidente de la Federación Andaluza comunica a Carlos Gracia el acuerdo alcanzado entre partes. Oficialmente, en abril llega a la escudería el documento que lo acredita.
Rall Racing se hace con un rallye desde cero en el apartado economico, pero con una deuda hacia ella del anterior que hace que la lucha por sacar adelante "su" prueba, sea todo un reto y premio al tesón. Redacción Andalucía Motor.
